El Supremo Tribunal Federal (STF) declaró inconstitucional la retención del 25% del Impuesto sobre la Renta (IRRF) sobre las pensiones y jubilaciones recibidas por brasileños residentes en el extranjero. Esta decisión representa una victoria para los contribuyentes, ya que establece que la misma tasa progresiva aplicada a los residentes brasileños también debe aplicarse a los jubilados y pensionistas en el extranjero.
Actualmente, la tasa progresiva exime montos de hasta dos salarios mínimos (R$2.824), mientras que la tasa del 27,5% se aplica a ingresos superiores a R$4.664,68. El Supremo Tribunal Federal (STF) basó su decisión en el principio de igualdad, enfatizando que una tributación desproporcionadamente alta para los no residentes viola los principios de progresividad fiscal y la prohibición de confiscación.
Con esta decisión, los jubilados y pensionados residentes en el extranjero verán una reducción significativa de su carga fiscal, que ahora será proporcional a sus ingresos, como ya ocurre con los residentes brasileños. Sin embargo, persisten dudas sobre si esta interpretación puede extenderse a otros tipos de ingresos percibidos por brasileños en el extranjero, lo que podría generar nuevos desafíos legales.
Esta decisión abre la puerta a reevaluaciones fiscales para los brasileños residentes en el exterior, especialmente aquellos que reciben rentas fijas provenientes de Brasil, como jubilaciones y pensiones.