Hoy en día, una de las principales preocupaciones de los altos directivos es precisamente cómo definir un modelo de protección de datos y privacidad, es decir, definir reglas de cumplimiento para el cumplimiento de la Ley General de Protección de Datos.

Para las empresas que cotizan en bolsa, contar con un programa de cumplimiento significa un mayor valor percibido para la empresa y la posibilidad de una mayor inversión externa, ya que la transparencia en el procesamiento de datos personales se ha convertido en un diferenciador para las empresas al momento de evaluar la confiabilidad y seguridad de sus negocios.