En el mes de las celebraciones del Orgullo LGBTQI+, es importante recordar un hito importante en la lucha enfrentada por las personas que integran este grupo, establecido por el Supremo Tribunal Federal en la sentencia de la Acción Directa de Inconstitucionalidad por Omisión y la Orden de Interdicto que trató del asunto.
El Supremo Tribunal Federal (STF) dictaminó que la legislatura no promulgó una ley que penalizara la homofobia y la transfobia, clasificándolas como parte de la Ley contra el Racismo. Según el Supremo Tribunal Federal, la «aversión odiosa a la orientación sexual o la identidad de género de una persona» constituye una expresión de racismo y debe ser castigada como tal.
A pesar de la decisión de criminalizar estos actos, Brasil aún enfrenta un número creciente de casos de violencia contra la comunidad LGBTQI+. Según un Boletín publicado por la Asociación Nacional de Travestis y Transexuales, en 2020 se registraron 175 asesinatos contra mujeres travestis y trans, mientras que Estados Unidos registró 44 casos en el mismo período. En los primeros cuatro meses de 2021, el número de asesinatos en Brasil alcanzó los 56.
A pesar del reciente fortalecimiento de esta comunidad, aún queda mucho por hacer para erradicar los prejuicios y fomentar el respeto. Una forma de avanzar es brindar información para crear conciencia.